09 octubre 2010

La mujer del Nobel

Liu Xia duerme y escribe versos a solas. Desde 2009, su marido cumple una condena de 10 años de cárcel. Ella es la mujer de Liu Xiaobo, el Nobel de la Paz 2010. Dos días después de que se diera a conocer la noticia en Oslo, él es el único hombre en el mundo que no sabe que ha ganado el reconocimiento. Sus carceleros no han tenido la decencia de hacérselo saber.
En China, como en Cuba, pensar diferente es un delito. Liu Xiaobo pasará una década de su vida en un calabozo por haber firmado la Carta 08, un manifiesto político que aboga por la modernización política de China. En el texto, se reclama libertad, derechos humanos y la partición de poderes en el país asiático.
Desde que se supo la noticia, Liu Xia permanece en arresto domiciliario y no se le permite el más mínimo contacto con ningún reportero internacional. Un cerco militar mantiene su casa rodeada y, hasta ahora, ha sido infranqueable. Todo el que ha intentado pasarlo, ha sido "invitado" a abandonar la ciudad.
China es una muralla de vergüenzas que muchos pasan por alto para no afectar sus relaciones comerciales. De ahí la importancia del Nobel a Liu Xiaobo. No hay un símbolo más peligroso que una mujer que duerme y escribe versos a solas, que no la dejan salir de su casa ni hablar con nadie. Nada impone más temor que una mujer que no flaquea.

6 comentarios:

Eliseo Alberto de Diego dijo...

Buen texto, querido Camilo, como todos. Un abrazo. La mujer del Nobel merecería la mitad de ese premio, al menos.

Thelma Castán dijo...

Excelente Camilo, lo he compartido con mis amigos porque al igual que tu estoy convencida de que no se puede callar a los que reclaman cosas tan elementales para la vida como es el derecho a disentir, o tener una opinión propia. El mundo no estará en paz hasta que la mayoría de los humanos estemos en paz con nostros mismos y para eso hay que abrazar y respetar a los demas.

Luis González Ruisánchez dijo...

Eso es lo que me da rabbia de quienes elogian la economía china y la ponen como ejemplo. Lo primero es la libertad y la diignidad del hombre, y China tiene un éxito económico bajo la bota del abuso ciiudadano, el totalitarismo y la tiranía peor. Eso no coloca como ejemplo a ninguna nación.

Camilo Venegas dijo...

Lichi, te mando un beso grande, ligado con un abrazo, como el hielo y el ron. Thelma, gracias por compartir estas cosas tan pequeñas que al final son catarsis inmensas.

Pedro Ramón López dijo...

Muy bueno poeta. Abrazos madrileños.

Rodrigo Kuang dijo...

Como tantas veces, miherma, en conexión. Pasa por las memorias, que hay otro enfoque por ahí, aunque nunca tan esencialmente poético. Esto fue hermoso, de verdad. Ya sabes que la cultura china es parte de mi vida, y sé que a veces uno le pasa la mano a lo que ama, aunque haya fisuras o barrancos. De cualquier modo, China es mucho más de Hu Jintao.